sábado, 17 de mayo de 2014

Epílogo - Novela de Álvaro

¡HOLIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!

¿Cómo estáis? OBVIAMENTE, espero que bien.

Bueno, como os habréis dado cuenta en el nombre de la entrada (y si no, ahora os lo explico yo) este es el epílogo de la novela de Álvaro.
Hace más de cinco meses que subí el último capítulo y bueno, pensé en hacer epílogo y aquí lo tenéis.

Tenía la idea de hacer esto, pero obviamente no iba a hacer una segunda temporada básicamente porque no tengo mucha imaginación. Así, qué, aquí tenéis el epílogo.

¡Espero que os guste y por favor, comentad!

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EN EL ÚLTIMO CAPÍTULO…

                                               Narra Álvaro

-Álvaro: Y esto fue lo que pasó. Esta fue nuestra historia. –Se me cae una lágrima.
-Paula: Nunca lo había sabido…
-Álvaro: Viviste parte de ella…
-Paula: La verdad que me gustaría haberlo disfrutado más esto con mamá… es decir, que ella también me la hubiese contado.
-Álvaro: Bueno, sabes su opinión… a mi también me hubiera gustado. –Sonríe.
-Paula: Sí, la verdad que nunca había sabido que mamá tuviera un diario… -Dijo con él en la mano.

-Álvaro: Y a mi también, pero tenéis que saber que mamá ya no volverá… -Dije sentado en la hierba del cementerio.



EPÍLOGO

                                      NARRA ÁLVARO

Escucho un ruido. Muevo la cabeza y abro los ojos sobresaltada por la luz. Miro al techo. Es blanco. Miro hacía mi lado y veo un sofá. Miro hacía el otro lado y veo una máquina. Mi brazo está lleno de cables. Me siento en la cama y me toco la cabeza. Me duele. Me tumbo de nuevo y cierro los ojos. Escucho unos pasos hacía la habitación.

-Álvaro: ¡Patri! –digo levantándome de nuevo.
-Mamá: ¡Álvaro! ¡Te has despertado! –dice corriendo hacía mí. Me abraza fuertemente.
-Álvaro: Mamá… ¿Y Patri? –digo mirándola.
-Mamá: Álvaro… ¿Quién es Patri?
-Álvaro: Mamá… ¿Tengo una banda formada?
-Mamá: Cariño, no sé de que me estás hablando… -dice acariciándome la mejilla.

Entonces… todo ha sido un sueño. Todo ha sido un maldito sueño. ¡Todo me pasa a mí!

-Álvaro: ¿Dónde estoy?
-Mamá: En el hospital, cielo. Has estado dos años en coma. Y te trajimos a este hospital, hospital Miramar.

¿DOS AÑOS? ¡¿EN COMA?!

-Mamá: Será mejor que te relajes, cielo. Tienes que descansar. –asiento y me tumbo en la cama. –Llamaré a un médico para decirle que despertaste. Te harán pruebas. –asiento y miro hacía un lado. -¡Un médico a la sala 218 por favor!

Me gustaría que hubiese sido real. Aunque acabara con que Patri moría. Hubiese sido feliz.

*Narra Patri*

-Mamá: Patri, despierta ya, por favor. –dice cogiendo mi mano. Abro un ojo y lo cierro rápidamente. Puta luz. Aprieto la mano de mi madre y esta se sorprende. -¿Patri?
-Patri: Mmm…
-Mamá: ¡Patri!
-Patri: ¿Qué hago aquí? –digo una vez ya tengo los ojos abiertos. Miro mi brazo y me sorprendo. -¿Y Paula? ¿Carlos? ¿Álvaro?
-Mamá: Cariño, no sé  quienes son esos. Llevas en coma dos años.
-Patri: ¿En coma? ¿Cómo que en coma? Pero si parecía real.
-Mamá: Cariño, todo fue un sueño.

Sólo un sueño. Sólo fue un sueño.

-Mamá: Llamaré a un médico para que venga a la habitación 217. Esta es tu habitación. –dice sonriendo.
-Patri: ¿De qué hotel?
-Mamá: Hotel Miramar.

*Narrador inconsciente*

Y lo que no sabía nadie, solamente tú y yo sabemos, qué estaban a pocos metros del uno y del otro, y eso había sido un sueño. Un sueño de ambos. No era un sueño real, pero ambos soñaron lo mismo. Y es qué… Quién sabe si dentro de unos años pasará algo con ellos dos. Lo que ahora sé, es que Patri y Álvaro se sienten más tristes que nunca. Habría sido una historia de amor intensa, y muy real. Pero, a veces, la vida es injusta.



sábado, 10 de mayo de 2014

Capítulo 14 - ''Los sueños se cumplen''

¡IMPORTANTE QUE LO LEÁIS! 

¡Hola, amores míos! ¿Cómo estáis? ¡Yo bien! Perfectamente :P

Hay muchísimas razones por las que no he subido capítulo, por temas personales, así, qué espero que me perdonéis D:

Para que me perdonéis, he hecho un capítulo más largo de lo normal, así, qué, de nuevo, lo siento.

He pensado en dejar la novela o subir en verano por que no he podido hacer un capítulo cada fin de semana cómo bien dije que intentaría a hacer.

Así, qué, lo siento si subo un capítulo cada mes o así, lo siento. Ahora que ya estamos en época de exámenes, creo que no subiré tanto. Pero bueno, haré lo que pueda.

Y bueno, ahora, disfrutad del capítulo.

Pero, para escucharlo, teneis que poneros una canción de un Youtuber, en este caso es el Youtuber Rush Smith, uno de mis favoritos. Y la cancion es Tierno - Rush Smith. (Si le dais al nombre, iréis al link) ¡Y ahora, a por el capítulo! Espero que os guste, y no dudéis en comentar plsss. Os quiero.

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EN ANTERIORES CAPÍTULOS...

-Carlos: Sabes que no me voy a separar de ti, ya te lo dije.

-___(tn): Lo sé. Pero no me merezco el tenerte a mi lado.

-Carlos: Me haces sonreír, me haces feliz. ¿Crees que no me mereces? A ver, yo sé que soy muy bonito y eso, pero que tampoco valgo tanto, ¿sabes?

-___(tn): Creído.

-Carlos: Me amas.

-___(tn): Te amo. –reímos y nos besamos.

CAPÍTULO 14 – ‘’Los sueños se cumplen’’

                                                         Narra Patu
                                                                                          
El día en el parque de atracciones acabó y al día siguiente teníamos que ir a Barcelona, ya que en tres días los chicos tendrían concierto. Fuimos y después de unas horas, llegamos. Todos agotados, se fueron a sus habitaciones con sus parejas. Y ahora viene lo que pasó en la nuestra; Álvaro y mía.
Por lo visto, Álvaro no tenía muchas ganas de dormir.

-Álvaro: Patukiiiii. –dice llamandome desde la habitación, ya que yo estoy en el baño.

-Patu: ¡Voy! –salgo del baño y... -¿Qué es esto? –digo sentandome en las piernas de Álvaro.

-Álvaro: Un regalo.

-Patu: Eso ya lo sé. –río. –Pero... ¿qué es?

-Álvaro: Un regalo.

-Patu: ¡Eso ya lo sé! –Álvaro ríe. Le encanta sacarme de quicio.

-Álvaro: Anda, abrelo, tonta. –Me lo da y le sonrío mirandolo. Pongo mi mirada en el regalo. Lo toco. Es blando. Lo abro y...

-Patu: ¡La madre que te parió! ¡Es precioso! –digo mirando el vestido que me ha regalado. El sueño que tenía, ya se me ha ido, te lo digo yo. Pongo el vestido en la silla y me tiro a Álvaro, el cual seguía sentando en la cama. Este ríe. -¡Te habrá costado un montón! –digo ya levantada y maravillada mirando el vestido.

-Álvaro: Tranquila, puedo permitirmelo.

-Patu: Pero ya sabes que no hace falta regalarme nada y... –me interrumpe.

-Álvaro: Patu, deja esto, ¿vale? Te lo he comprado porque yo he querido y punto. –dice en frente de mi.

-Patu: Ok, ok. –digo sonriendo.

-Álvaro: Pontelo, anda, que nos vamos a cenar por ahí.

-Patu: ¿Sí? –asiente y sonrío. –Voy a ponermelo en el baño.

-Álvaro: Puedes ponertelo aquí.

-Patu: Sí, claro. Que te lo has creído tú. –digo riendo. Cojo el vestido y voy al baño. Me miro en el espejo y aparto la vista rápidamente. Me quito los pantalones, y la camiseta. Antes de ponerme el vestido, me miro en el espejo. Me pongo de lado. Parece que haya perdido unos kilos. Ea, pues mejor. Me pongo el vestido y me miro en el espejo. Enchufo la plancha y me quito el moño mal hecho que llevaba. Me plancho un poco el pelo, decente y me lavo los dientes. Me miro en el espejo. Perfecta en solo diez minutos. Salgo y veo a Álvaro haciendo zapping. Me mira y sonríe. Él se ha puesto una corbata, una camisa blanca y una americana. Cómo iban en Viral.

-Álvaro: Señorita Patuki, ¿me concede ir con usted hasta el restaurante y hacerle pasar la mejor noche de tu vida? –dice después de haberse levantado y haber apagado la tele.

-Patu: Estaría encantada, señor. –digo sonriendo. Paso mi brazo por el suyo, y antes de salir, cojo el bolso y la tarjeta de la habitación. Todo apunto. Salimos y cierro la puerta. -¿A dónde me llevas?

-Álvaro: Ves pensando sitios. –me sonríe y río. Salimos del hotel y Álvaro coge un pañuelo de su bolsillo. –Ven, espera, te tapo los ojos.

-Patu: Sabes que no me gusta que me den sorpresas. –digo mientras Álvaro me tapa los ojos.

-Álvaro: Esta sorpresa será diferente. –me susurra al oído.

-Patu: ¿Esta sorpresa me sorprenderá más? –digo agarrandome a Álvaro para no caerme mientras caminamos.

-Álvaro: Todas las sorpresas son sorprendentes, ¿no? –se pone delante mío y me lo susurra al oído.

-Patu: Supongo. –sonrío. Álvaro se para y me coge las manos.

-Álvaro: Te amo. –dice sonriendo. No le veo la sonrisa. Pero noto que está sonriendo. Me sonrojo y le beso.

-Patu: Te amo.

*En el restaurante*

-Álvaro: Ya te lo puedes quitar.

-Patu: Wow, esto es precioso.

-Álvaro: Cómo tú. –dice sonriendo. Le beso y entramos al restaurante. –Tengo mesa a nombre de Álvaro García.

-Camarero: Señor García... –dice mirando la lista. –Sí, aquí. La mesa es aquella de allí. La mesa número 27. –Le damos las gracias al camarero y nos vamos hacía la mesa. Álvaro me separa la silla de la mesa para que me siente y yo río. Me siento y él hace lo mismo en la silla de enfrente mío.

Álvaro y yo, cenamos entre risas y miradas. Cuándo acabamos, Álvaro paga y salimos a dar una vuelta afuera.

-Álvaro: Patri, ven por aquí. –dice caminando por un paso de zebra.

-Patu: ¿A dónde vamos?

-Álvaro: Ahora si que te lo digo. –ríe. –Te voy a enseñar una cosa. –Después de diez minutos andando, (Hay que decir, que Álvaro me tuvo que coger en brazos porque no podía más con los tacones) llegamos. Álvaro me tapó los ojos con las manos una vez me dejó en el suelo para que no pudiera ver nada. -¿Preparada? –Asiento.

-Patu: Sí. –digo sonriendo. Álvaro me destapa los ojos y me señala un puente que hay.

-Álvaro: ¿Ves que pone? –dice mirandome. Me cae una lágrima y me la limpio rápidamente. Asiento y le abrazo.

-Patu: Gracias, Álv.

Y es que, ¿a quien no le gustaría que su novio, le pusiera ‘’LOS SUEÑOS SE CUMPLEN’’ en un puente?

-Patu: Te quiero.

-Álvaro: Yo más.

-Patu: Lo dudo.

-Álvaro: Pues es verdad. Te quiero más que a mi propia vida. –me doy la vuelte mirando de nuevo el puente.

-Patu: Estás loco. –digo mirando el puente. -¿Cómo lo hiciste?

-Álvaro: A ver, uno tiene sus contactos... –dice riendo.

-Patu: Tonto.

[...]


-Patu: Te quiero, ¿lo sabes, no?

-Álvaro: Yo no te quiero. Te amo. –sonrío tímidamente y le miro a los ojos. Me acerco a Álvaro y este me besa. Pone sus manos en mi cintura y yo pongo mis manos en su pelo. Lo acaricio mientras seguimos besandonos. Enredo mis dedos en su pelo. Me separo de él y le acaricio la cara.

-Patu: No te separes nunca de mí, por favor.

-Álvaro: Esto esta hecho. –sonríe y se toca la nuca con la mano. Me acaricio a él y le acaricio la cara. Sonríe. Me coge en brazos y me pone en la cama del hotel. Le miro y reímos.

-Patu: Todo es increíble.

-Álvaro: Tú también eres increíble. –Le miro y nos besamos. Nos separamos y nos quedamos mirando.

-Patu: ¿Sabes? La única distancía que quiero entre nosotros dos es cuándo nos separamos al besarnos. –Álvaro me mira y sonríe.

Le miro esos ojos verdes que siempre miro y que me dan confianza, esos ojos que con tan solos mirarlos sé lo que trasmiten y lo que te llegan a ‘decir’. Esos ojos increíbles que tiene. Como él y todo lo que estoy viviendo. ¡Estoy en un sueño! Es irrealista. Los conozco desde el principio, los vídeos de Youtube, cómo las demás chicas, y ahora, está conmigo en esta cama. Mirandome. Acariciandome. Besandome. Queriendome. Amandome... Sí, sin duda estoy en un sueño. Nos peleamos, cómo todas las parejas. ¿Qué pareja no se ha peleado? Creo que peleandose la gente se entiende. Álvaro me acaricia la barbilla y se acerca a mi para besarme.

-Álvaro: Te amo.

-Patu: ¿Cuánto?

-Álvaro: Lo suficiente cómo para aceptar tus defectos y aún así, creer que eres la persona perfecta. –Le beso apasionadamente. –Te quiero.


-Patu: Yo más.